Nunca es tarde para dejar de fumar

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Escrito por:
Lic. Tirso Tamayo. Educador en salud – Gerontólogo
Revisado por:
Dra. Margarita Pineda. Geriatra
Publicado:
30-May-22 6:00:00 AM
Palabras claves:
fumar, adicción, cáncer, adulto mayor, tabaco, pulmón
 

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lunes, 18 de diciembre de 2017
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miércoles, 1 de junio de 2022
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Las personas adultas mayores tienen un riesgo muy alto de sufrir las consecuencias del tabaco. La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología destaca que el abandono de este hábito, no sólo aumenta su esperanza de vida, sino que reduce su dependencia tanto física como psíquica. No debemos olvidar las consecuencias para el fumador pasivo que es una persona que no fuma, pero que está sometida a los daños que el tabaco provoca por aspirar el humo en su entorno.

¿Qué puede causarle fumar por largo tiempo?

  • Daños pulmonares. Fumar daña los pulmones y las vías respiratorias, causando una bronquitis crónica o una enfermedad pulmonar llamada enfisema, que destruye los pulmones y hace que sea muy difícil respirar. Además, aumenta la probabilidad de contraer una gripe, pulmonía u otras infecciones que pueden obstaculizar la respiración.
  • Daños al corazón. Si padece presión alta y además fuma, aumenta la posibilidad de sufrir un ataque al corazón o accidentes cerebrovasculares (derrames).
  • Cáncer. Fumar favorece a que usted pueda sufrir cáncer de pulmón, boca, laringe, esófago, estómago, hígado, páncreas, riñón, vejiga y cérvix.
  • Osteoporosis. Si fuma, su posibilidad de desarrollar huesos débiles es mayor.
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Beneficios de dejar de fumar

  • Las personas adultas mayores que llevan muchos años fumando y deciden abandonar este hábito, pueden reducir el riesgo de enfermedades como cardiopatías (afectan al corazón), cáncer o enfermedades respiratorias.
  • Evita el avance progresivo de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, lo que prolonga su vida.

¿Cómo romper la adicción?

El primer paso para dejar de fumar es tomar la decisión de hacerlo. Luego se debe hacer un plan de cómo se va a cumplir esa decisión.

El plan puede incluir

  • Leer información de autoayuda.
  • Participar en consejería individual o grupal.
  • Unirse a un grupo de apoyo.
  • Pedirle a un amigo que dejen de fumar juntos.
  • Usar terapia de reemplazo de nicotina.
  • Tomar medicamentos para ayudar con los síntomas de abstinencia de la nicotina.
  • Desechar todos los cigarrillos y los ceniceros de su casa, automóvil y lugar habitual o de trabajo.
  • No permita que las personas fumen en su casa.
  • Recuerde las ocasiones anteriores cuando intentó dejar de fumar. Piense en lo que funcionó y en lo que no funcionó.
  • Una vez que deje de fumar, no fume ¡NI SIQUIERA UNA BOCANADA! 

Descubra qué funciona mejor para usted. Algunas personas dicen que usar varios métodos es la clave para poder dejar de fumar.

¿Cómo obtener ayuda en el ISSS?

Si quiere dejar de fumar, empiece por hablar con su médico. Él o ella puede aconsejarle sobre el proceso de tratamiento. También, puede obtener información sobre "La Clínica de Cesación de Tabaco y Tratamiento", actualmente está ubicada en el Consultorio de Especialidades.

Para ayudar a las personas en su lucha contra el tabaco, y especialmente para evitar las enfermedades severas provocadas por el humo del cigarro, el ISSS puso en marcha el programa en 1993, y con el que se brinda apoyo psicológico y médico para todo aquel que desee, de manera voluntaria, dejar la adicción. El programa funciona de la siguiente forma:

  • La clínica está conformada por un equipo integral de trabajo, en los que se mencionan médicos neumólogos, psiquiatras, trabajadoras sociales, psicólogos y personas ex fumadoras que comparten sus experiencias y las técnicas para dejar el vicio del fumado.
  • Además se realiza una evaluación psicológica y neumológica donde se mide la función pulmonar de la persona y se determina el daño que ha causado el cigarrillo durante el tiempo de su adicción.
  • En la clínica se detectan pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), de los cuales el 50 por ciento se presenta en estadios de moderado a severo. Además se diagnostican enfermedades cardiovasculares y un 5 por ciento de nuevos casos de cáncer de todo tipo.
  • En la clínica se tiene a disposición parches de nicotina, los que se colocan en el brazo del paciente. Además se indican fármacos que ayudan a controlar la ansiedad e inhibir el deseo de volver a fumar.
  • Cada lunes y jueves se realizan sesiones grupales, con un promedio de 20 a 25 personas. En estas sesiones se plantean las técnicas de modificación de conducta, educación en salud, y el tratamiento del síndrome de la Abstinencia.

Este programa es altamente preventivo, ya que no importa la cantidad de cigarrillos que fumaba o los años que pasó con el vicio el paciente logra los siguientes beneficios:

  • A los 20 minutos: baja la presión arterial y el ritmo cardíaco llega a sus cifras normales.
  • A las 24 horas: disminuye el riesgo de sufrir un infarto.
  • A las 48 horas: aumenta la agudeza del olfato y el gusto.
  • De 2 a 3 meses: la función pulmonar mejora hasta un 30 por ciento.
  • De 1 a 4 meses: disminuye el riesgo de sufrir infecciones respiratorias.
  • Al año: el riesgo de padecer insuficiencia coronaria se reduce al 50 por ciento, comparado con una persona que aún está fumando.
  • A los 5 años: el riesgo de morir de cáncer es igual al de una persona que no ha fumado.

¡ACERCATE, LA DECISION ES TUYA!

 
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