El bruxismo y el estrés

Familia > Hombre
Escrito por:
Dra. Zuleima Bichara de Morales y Dra. Nelly Arias - Odontólogos
Revisado por:
Dra. Ana Guadalupe Contreras de Miranda. Odontóloga
Publicado:
31-Aug-23 6:00:00 AM
Palabras claves:
estrés, rechinar, dientes
 

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Familia:Hombre
martes, 19 de diciembre de 2017
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jueves, 31 de agosto de 2023
No
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​​Podemos sufrir de estrés por diferentes razones. El aumento de las responsabilidades en el trabajo, problemas familiares, la delincuencia, la sensación de impotencia ante los problemas, entre otros factores,​​ nos están causando cada día más estrés. Todos en algún momento de nuestra vida nos hemos sentido es​tresados.

En la actualidad se conocen 3 tipos de estrés.

  • Estrés rutinario: es el que tenemos diariamente con nuestras responsabilidades de trabajo y de familia.
  • Estrés por cambios negativos: como la pérdida de un trabajo, enfermedad o divorcio.
  • Estrés traumático: cuando hay peligro de perder la vida, como en la guerra o en un terremoto.

Cada persona reacciona de diferente forma al estrés, algunos sufren de dolor de estómago o de insomnio y hay otros que rechinan o aprietan los dientes de forma inconsciente. A esta acción de crujir y presionar los dientes unos con otros se le conoce como bruxismo.

¿Qué es el bruxismo?

Es el apretar o rechinar los dientes de manera inconsciente, puede ser durante el día o la noche y es una de las formas que liberamos nuestro estrés. En promedio, alguien que no padece de bruxismo aprieta los dientes entre 4 a 10 minutos en el día, haciendo una presión de 10 a 35 kg. de fuerza, pero la persona con bruxismo puede pasar hasta 4 horas en un día crujiendo y presionando su dentadura, con una fuerza de 150 a 300 kg. , esto es en promedio 30 veces más de lo normal.

Existen otros factores que pueden contribuir al desarrollo del bruxismo, entre estos están:

  • Hábitos del sueño.
  • Tener dificultad para relajarse.
  • Mala alineación de los dientes.

El bruxismo puede ocasionar los siguientes síntomas

  • Dolores de cabeza fuertes que muchas veces pueden confundirse con neuralgias, migrañas u otras enfermedades. El estar constantemente apretando los dientes es similar a cuando ejercitamos excesivamente un músculo en el gimnasio y al día siguiente no se aguanta el dolor.
  • Sensibilidad en los músculos de la cara.
  • Dolor de oídos debido a que la articulación temporo mandibular está muy cerca del conducto auditivo.
  • Desgaste de los dientes.
  • Sensibilidad con alimentos calientes, fríos y dulces, por causa del desgaste de los dientes.
  • Dolor e inflamación de la mandíbula.
  • Insomnio.
  • Ansiedad.

Cómo clasificamos el bruxismo

El bruxismo lo clasificamos según la forma de rechinar, momento y el grado de afectación de los dientes.

Según la forma en que se rechinan los dientes puede clasificarse en:

  • Bruxismo de apretamiento o céntrico. Predominan los dolores de cabeza tipo tensionales, el desgaste del cuello de los dientes y se ven más afectados los premolares.
  • Bruxismo de frotamiento o excéntrico. Causa el desgaste de los dientes y puede ocasionar sensibilidad dental. También, produce disminución de la mordida, ya que lo que los dientes se hacen más pequeños por el desgaste. En ocasiones, los pacientes pueden tener los dos tipos de bruxismo.

Según el momento que se presenta:

  • Bruxismo del sueño: sucede cuando se está dormido y se están rechinando los dientes. A veces, son los compañeros de habitación quienes no pueden dormir por el ruido de los dientes.
  • Bruxismo de vigilia: ocurre durante el día y está asociado a estrés laboral.

Según el grado de afectación:

  • Grado I. Hábito inicial. Ocurre de manera ocasional, es por corto periodo de tiempo, es reversible, puede ocurrir por factores locales de la boca. Por ejemplo, que una pieza dental tenga un punto donde topa primero con la pieza contraria y cause que la persona apriete. Este puede ser corregido y terminar el bruxismo. No hay signos de ansiedad.
  • Grado II. Hábito establecido con ansiedad presente. Se requiere tratamiento integral para revertir el bruxismo, de no hacerlo, puede pasar a un hábito grado III.
  • Grado III. Hábito constante. El paciente continúa rechinando dientes a consciencia. Se observan lesiones bucales que muchas veces son permanentes. Esta etapa es de difícil manejo y muchas veces los tratamientos no tienen éxito. El daño es irreversible en la articulación y tejidos dentarios, hay que tener mayor atención en el tratamiento.

¿Cómo se diagnostica?

Por lo general, los pacientes consultan a otorrinos o neurólogos por dolor de oídos o migrañas, sin embargo el diagnóstico de bruxismo se realiza en la consulta odontológica, en visita de rutina o por molestias. El odontólogo revisará las estructuras dentales y puede encontrar en el bruxismo la causa de dichas molestias. A veces, puede ser necesario tomar radiografías y verificar el daño ocasionado a los dientes.

Una vez hecho esto, se dará paso al tratamiento adecuado, que incluye el procedimiento dental. De ser necesario se refiere al paciente con el psicólogo o psiquiatra según la causa de su ansiedad o estrés.

Recomendaciones de cuidado personal para aliviar el dolor

  • Ponga hielo en el área de los músculos inflamados.
  • Evite mascar chicles.
  • No coma alimentos duros.
  • Beba mucha agua.
  • Duerma bien.
  • Masajee los músculos de cuello, hombros y cara.
  • Procure mantener relajados los músculos faciales y mandibulares todo el día.
  • Trate de disminuir el estrés.
  • Aprenda técnicas de relajación.

Tratamiento:

Al presentarse demasiado desgaste se produce sensibilidad dental. En estos casos, los odontólogos del ISSS pueden efectuar rellenos de resina o aplicar desensibilizantes, dependiendo del cuadro del paciente. El tratamiento es para disminuir dolor, evitar un daño dental permanente y reducir el rechinamiento de los dientes lo más que se pueda.

Además, si existe interferencias de piezas dentales, odontología general los refiere a periodoncia para que les puedan realizar un ajuste oclusal (ajuste dental) que es un desgaste selectivo que se le hace a las piezas para evitar contactos prematuros y eliminar la interrupción.

Para detener el daño a los dientes, se dejan protectores bucales o aparatos (férulas) como tratamiento en contra del rechinamiento, apretamiento y trastornos de la articulación temporo mandibular. El objetivo de las férulas es ayudar a proteger los dientes de la presión del rechinamiento.

Sin embargo, para disminuir el bruxismo nocturno, la relajación y modificación de comportamientos diurnos son suficientes.

Referencias

Bruxismo tratamientos, síntomas e información en Dmedicina. (2017). DMedicina. Retrieved 10 February 2017, from http://www.dmedicina.com/enfermedades/psiquiatricas/bruxismo.html

Bruxismo: MedlinePlus enciclopedia médica. (2017). Medlineplus.gov. Retrieved 10 February 2017, from https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001413.htm

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