Reconociendo una emergencia en nuestros hijos

Familia > Niñez
Escrito por:
Dra. Claudia Imbers de Lazo. Pediatra
Revisado por:
Dr. Rafael Lopez Urbina. Pediatra
Publicado:
29-Jan-18 6:00:00 AM
Palabras claves:
Deshidratación, dolor, letargo, fiebre, emergencia
 

Reutilización de elemento de catálogo

Familia:Niñez
jueves, 14 de diciembre de 2017
56
miércoles, 9 de mayo de 2018
No

​​​​​

Todos los padres y madres saben del riesgo que corren los niños cuando se produce una lesión o fractura en un hueso, se queman, cuando se da un sangrado en abundancia, asfixia o un ataque convulsivo, entre otras situaciones de peligro. Sin embargo, ciertos síntomas que pueden representar una emergencia son difíciles de reconocer o bien no son considerados serios en el hogar. Si su hijo tiene alguno de los siguientes síntomas, también debe ponerse en contacto inmediatamente con su médico:

  • Recién nacido enfermo: Si el niño o la niña tiene menos de un mes de edad y presenta fiebre, tos, cansancio, dificultad para mamar, cambios del color de la piel o usted lo ve en mal estado general, el problema podría ser serio y debe consultar lo antes posible.
  • Letargo severo: La fatiga durante una enfermedad es normal, pero observe si su hijo fija la mirada en el espacio, no sonríe, no juega, está demasiado débil para llorar, está "aguadito", o si es difícil despertarlo. Estos son síntomas serios.
  • Dolor intenso: Si su hijo llora cuando usted lo toca o lo mueve, sobre todo cuando es en alguna parte específica de su cuerpo, esto podría ser grave. Los gritos constantes o la incapacidad para dormir en un niño menor de un mes también indican dolor intenso.
  • Abdomen doloroso al tacto o la presión: Sobre todo si existe dolor persistente en el área del abdomen con duración mayor o igual de 4-6 horas. Si este se ve hinchado y se siente duro debe apresurar su consulta.
  • Testículo doloroso al tacto o la presión: El escroto es la bolsita que contiene los testículos. El comienzo repentino de dolor en la ingle puede ser causado por el retorcimiento (torsión) del testículo. Observe cambios de coloración o hinchazón del mismo así como dificultad para caminar. Esto requiere atención inmediata en menos de 8 horas para salvar el testículo.
  • Deshidratación: Que su hijo este deshidratado significa que la cantidad de líquidos en el cuerpo es inferior a la normal, generalmente se presenta después de intensos vómitos o diarrea. Si su hijo esta deshidratado tendrá la piel fría o sudorosa, desgano, ausencia de lágrimas al llorar, la boca y lengua estarán secas.
  • Dificultad para respirar: Si su hijo tiene dificultad para respirar o “chillido de pecho”, necesita ser examinado por el médico.

Otros signos a tomar en cuenta

Babeo, fiebre y dificultad para respirar (en niños mayores) así como moretes en zonas no habituales o algunas otras coloraciones anormales en la piel, dolor de cabeza intenso, alteraciones de la visión y audición.

¿Qué hacer?

Ante cualquier síntoma descrito anteriormente consulte a emergencias. No automedique a su hijo, siempre busque ayuda de un profesional.

¿Es la fiebre una emergencia?

No en sí misma, pero la fiebre mayor de 39°C, a pesar de medicamentos para disminuirla, puede indicar una infección severa (meningitis, dengue, infección urinaria, etc.), o en niños susceptibles puede producir una condición benigna llamada convulsión febril. Por lo tanto: si la fiebre no baja, consulte al centro de atención más cercano.

Reconociendo una emergencia en nuestros hijos