Adolescentes embarazadas: riesgos y consecuencias

Familia > Adolescencia
Escrito por:
Dr. Rafael Lopez Urbina. Pediatra
Revisado por:
Dr. Jaime Castro
Publicado:
20-Jul-17 6:00:00 AM
Palabras claves:
embarazo, adolescente, anticonceptivos, menarquia
 

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Familia:Adolescencia
jueves, 14 de diciembre de 2017
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miércoles, 9 de mayo de 2018
No

 

La Organización Mundial de la salud (OMS) define a la adolescencia como el período de la vida en el cual el individuo adquiere la capacidad reproductiva, transita los patrones psicológicos de la niñez a la adultez, consolida la independencia socioeconómica y está ubicada entre las edades de 10 a 20 años.

Es considerada como un periodo de la vida libre de problemas de salud, pero desde el punto de vista de los cuidados de la salud reproductiva, el ser adolescente es, en muchos aspectos, un caso especial. Este período importante del desarrollo del ser humano se ve alterado e interrumpido cuando la joven se embaraza.

Las estadísticas a nivel mundial reportan que una de cada cinco mujeres en el mundo ya tiene un hijo antes de los 18 años y cada año se producen 16 millones de nacimientos provinientes de madres adolescentes. En las regiones más pobres del planeta, una de cada tres mujeres son madres adolescentes.

Según los expertos, la edad más apropiada para ser mamá es entre los 24 y los 35 años, ya que el riesgo para la salud de la madre y el niño es mucho menor debido a que la mujer ya tiene un desarrollo físico y mental competente para la etapa de la maternidad. El embarazo en la adolescencia es considerado de alto riesgo y conlleva más complicaciones. La adolescente no está preparada ni física, ni mentalmente para tener un bebé y asumir la responsabilidad de la maternidad.

Factores predisponentes:

  • Menarquia (primera menstruación de la adolescente) temprana: Este proceso otorga madurez reproductiva, cuando aún no es capaz de manejar las situaciones de riesgo.
  • Inicio precoz de relaciones sexuales: cuando aún no existe la madurez emocional necesaria para implementar una adecuada prevención del embarazo.
  • Familias disfuncionales: en donde solo está presente uno de los padres o a pesar de estar ambos no existe una adecuada comunicación o no hay una armonía en el grupo familiar. Estas situaciones generan carencias afectivas que la joven no sabe resolver, impulsándola a relaciones sexuales tendientes a mucho más sometimiento para la recepción de afecto, que un genuino vínculo de amor.
  • Bajo nivel educativo: con desinterés general. Cuando hay un proyecto de vida que prioriza alcanzar un determinado nivel educativo y posponer la maternidad para la edad adulta, es más probable que la joven, aun teniendo relaciones sexuales, adopte una prevención efectiva del embarazo.
  • Migraciones recientes: con pérdida del vínculo familiar. Ocurre con el traslado de las jóvenes a las ciudades en busca de trabajo y aún con motivo de estudios superiores.
  • Pensamientos mágicos: propios de esta etapa de la vida, que las lleva a creer que no se embarazarán porque no lo desean.
  • Fantasías de esterilidad: comienzan sus relaciones sexuales sin cuidados y como no se embarazan por casualidad, piensan que son estériles.
  • Falta o distorsión de la información: es común que entre adolescentes circulen "mitos" como: sólo se embaraza si tiene orgasmo, o cuando se es más grande, o cuando lo hace con la menstruación, o cuando no hay penetración completa, etc.
  • Controversias entre su sistema de valores y el de sus padres: cuando en la familia hay una severa censura hacia las relaciones sexuales entre adolescentes, muchas veces los jóvenes las tienen por rebeldía y, a la vez, como una forma de negarse a sí mismos que tiene relaciones, no implementan medidas anticonceptivas.
  • Factores socioculturales: la evidencia del cambio de costumbres derivado de una nueva libertad sexual, que se da por igual en los diferentes niveles socioeconómicos.
  • Menor temor a enfermedades venéreas.

Consecuencias biológicas para la adolescente embarazada

Las adolescentes que se embarazan presentan una serie de situaciones que ponen en riesgo su salud, la del feto y en muchos casos la vida de ambos, tales como:

  • Malnutrición, debido a carencia de nutrientes esenciales para el buen desarrollo del feto (hierro, calcio y ácido fólico principalmente).
  • Mayor número de abortos espontáneos.
  • Partos prematuros, hay un gran número de recién nacidos, hijos de madres adolescentes que nacen antes de la semana 37 de edad gestacional.
  • Mayor incidencia de recién nacidos con peso bajo, esto se debe a que el cuerpo de la adolescente embarazada no ha desarrollado un útero lo suficientemente maduro para alojar y nutrir un feto de manera efectiva.
  • En los casos de embarazos de niñas de menos de 15 años, el recién nacido tiene más posibilidades de nacer con malformaciones.

Consecuencias psicosociales para la adolescente embarazada

En general, los estudios hablan de una serie de circunstancias por los que pasan las madres adolescentes:

  • Miedo a ser rechazadas socialmente: una de las consecuencias de la adolescencia y el embarazo es que la joven se siente criticada por su entorno y tiende a aislarse del grupo.
  • Rechazo al bebé: son niñas y no desean asumir la responsabilidad, el tiempo y las obligaciones que supone ser madre. Sin embargo, esto también las hace sentirse culpables, tristes y su autoestima se ve reducida.
  • Problemas con la familia y su entorno social: comunicar el embarazo en la familia muchas veces es fuente de conflicto e incluso rechazo por parte de su propio entorno. En estratos sociales de mediano o alto poder adquisitivo, la adolescente embarazada suele ser objeto de discriminación por su grupo de pertenencia.
  • Frecuente abandono de los estudios: al confirmarse el embarazo o al momento de criar al hijo, lo que reduce sus futuras oportunidades de lograr buenos empleos y sus posibilidades de realización personal al no cursar carreras de su elección. También le será muy difícil lograr empleos permanentes con beneficios sociales.
  • Embarazos frecuentes: las adolescentes que son madres tienden a tener un mayor número de hijos con intervalos intergenésicos más cortos, eternizando el círculo de la pobreza.

Consecuencias para los bebés de madres adolescentes

  • Tienen un mayor riesgo de "muerte súbita del lactante".
  • Tienen un mayor riesgo de sufrir abuso físico, negligencia en sus cuidados, desnutrición y retardo del desarrollo físico y emocional.
  • Muy pocos acceden a beneficios sociales, especialmente para el cuidado de su salud, por su condición de "extramatrimoniales o porque sus padres no tienen trabajo que cuenten con ellos.
  • Consecuencias para el padre adolescente
  • Es frecuente la deserción escolar para absorber la manutención de su familia. - También es común que tengan peores trabajos y de menor remuneración que sus padres, sometidos a un estrés inadecuado a su edad.
  • En general, todo ello condiciona trastornos emocionales que dificultan el ejercicio de una paternidad feliz en el futuro.
  • Las parejas adolescentes se caracterizan por ser de menor duración y más inestables, lo que suele magnificarse por la presencia del hijo, ya que muchas se formalizan forzadamente por esa situación.

La OMS recomienda para evitar el embarazo en la adolescencia: limitar o evitar el matrimonio antes de los 18 años, aumentar el uso de anticonceptivos para los adolescentes, reducir las relaciones bajo coacción y apoyar los programas de prevención de embarazos en la adolescencia.

En cualquier caso, la mejor prevención es que los jóvenes tengan una buena educación sexual desde el mismo seno de la familia. Es importante informar sobre los riesgos y complicaciones del embarazo en la adolescencia y todos los cambios que se producirán desde el momento en que la adolescente se quede embarazada.

La comunicación en la familia es esencial, por tanto, debe haber un diálogo abierto y transparente para que los jóvenes tengan toda la información a su alcance.


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