Cómo detectar si un adolescente consume drogas

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La adolescencia es la etapa en donde se adquiere la mayoría de los hábitos dañinos para la salud y que pueden durar el resto de la vida. El tabaquismo, el sedentarismo o una mala alimentación durante la adolescencia no causan mayores problemas o enfermedades, pero sus efectos y costos se evidencian más tarde en la vida.

¿Qué factores favorecen el consumo de drogas en la adolescencia?

• Baja percepción de riesgo de consumo.
• Fácil acceso y disponibilidad de drogas.
• Convivir con amigos consumidores.
• Bajo rendimiento escolar y bajo involucramiento de los padres en la vida de los adolescentes.

Las drogas pueden modificar el pensamiento y la conducta de la persona que la consume, alterando su comportamiento y, a la larga, el modo de ser, según el tipo de sustancia, la manera de consumirla y las características personales de quien las toma.

Según datos de la Encuesta de Salud Escolar El Salvador, para el año 2013, el 11.6% de los adolescentes utilizaban drogas, siendo la más usada la marihuana con el 8.4%. El 4.2% respondió que consume drogas una o dos veces en el mes, el 2.0% entre tres a nueve veces y 1.7% más de diez veces.

De los que usaron drogas, el 57.3% las utilizó antes de los 14 años de edad. El 59.5% eran hombres. El 3.5% tuvo problemas con su familia, amigos o faltó a la escuela a causa de las drogas. El 15.3% consideró que tiene acceso a la droga muy fácilmente.

Sobre las razones para utilizar drogas, un 3.6% de los adolescentes respondió que era por curiosidad. Por preocupación o estrés el 3.0%. El 1.8% por enojo y el 0.8% por presión de amigos. Los jóvenes pueden tener problemas serios con el alcohol u otras drogas, aunque no desarrollen dependencia a las sustancias.

Los adolescentes con alto riesgo a desarrollar problemas con las drogas incluyen aquellos con: historial familiar de abuso de sustancias, adolescentes con depresión, con autoestima baja, o aquellos que no se sienten aceptados en su grupo.

Señales de abuso de drogas en el adolescente

• A nivel social y familiar: cambio de amistades, riñas frecuentes, problemas con la ley, desobediencia, mentiras repetidas.
• Físicas: fatiga, quejas sobre la salud física, ojos rojos y sin brillo, o tos persistente.
• A nivel emocional: baja autoestima, apatía a las actividades que antes le gustaban, comportamientos arriesgados, irritabilidad.
• A nivel escolar: malas calificaciones, ausencias, problemas de disciplina, irrespeto hacia las autoridades, no hace tareas.

Aunque muchas de estas señales son propias de la adolescencia no deben pasar desapercibidas. Se debe hablar con sinceridad y claridad con los hijos sobre la preocupación del posible uso de drogas. Si tiene sospechas de que su hijo consume, visite a su médico, quien hará una evaluación y mediante exámenes clínicos podrá determinar la presencia de drogas en el organismo. Si se confirma el uso o abuso de sustancias deberán acudir a un especialista.

¿Cómo proteger a mi hijo adolescente del uso de drogas?

• Aprenda a observar, escuchar y preguntar de otra manera, dejando caer información, ideas y opiniones. Evite las actitudes de autoritarismo.
• Pida a sus hijos que sean responsables, valore sus aciertos y sus errores, sin agasajarles ni criticarles de forma tajante.
• Enséñeles a ser autónomos y responsables. No podemos estar siempre encima de ellos y sobre protegerlos.
• Su hijo tiene derecho a tener intimidad, mantenga una comunicación abierta y constante.
• Prediquemos con el ejemplo. A menudo esto es más importante que los consejos y recomendaciones.

¿Qué debo hacer si mi hijo o hija está usando drogas?

• Háblele con calma sobre la magnitud de su uso. Exprésele su preocupación.
  
• Recuérdele las reglas de la casa y las consecuencias por violarlas. Si usted cree que está abusando, o sus esfuerzos en aplicar las reglas han fallado varias veces, busque ayuda de un consejero, médico, u otro profesional de la salud.